Los rumores sobre un inminente decreto que promovería una fuerte reestructuración del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), junto a un ajuste de su plantilla de personal, puso en estado de alarma a directivos, técnicos, trabajadores y productores en general. Desde allí, se rechaza toda implicancia que apunte a la pérdida de autonomía, desguace y/o venta de inmuebles o propiedades que podría sufrir la entidad.
En diálogo con el programa Nuestra Tierra, que se emite por Radio Perfil, Ariel Pereda, director nacional del INTA, aseguró que el presupuesto del instituto no debe ser tomado como un gasto sino como una inversión que se hace desde el Estado en el desarrollo del sector productivo en su conjunto.
Pereda explicó que “por cada peso que se gasta en el INTA, el sector productivo lo multiplica por tres y hasta por cinco, con lo cual el gasto que se hace en el Instituto es inversión”. Afirmó que desde el organismo no hay diálogo con Federico Sturzenegger, ministro de Desregulación y Transformación del Estado y que el funcionario “está dando datos imprecisos y está mal asesorado”, dijo. A esto, agregó que el INTA presentó su propio plan de ajuste por unos 1.000 millones de pesos anuales que no fue tenido en cuenta por la Casa Rosada.
Por otro lado, Pereda consignó que “el INTA en los últimos años no ha tenido política partidaria o política” y recordó que el instituto se maneja de “manera descentralizada aunque no de manera autárquica: sabemos que el INTA es muy fuerte como para también darle rienda suelta para que la entidad se exprese con todo su potencial”.
“Soy un técnico convencido de que podemos mejorar, y queremos transformarlo técnica, académica y tecnológicamente. Tenemos la ideología de desarrollar el país a través de sectores productivos y recortar con motosierras, sin hacer consultas, también es ideología”,
dijo.
No obstante, Pereda reconoció que “el INTA tiene cosas por mejorar. Un montón. Y también tiene un montón de valores y no tenemos situaciones de corrupción”.
Plan de ajuste propio y planteos a Sturzenegger
Tras asumir Javier Milei en diciembre de 2023, y en línea con la política de austeridad propuesta por la administración de La Libertad Avanza, desde la directiva del INTA se propuso encarar un proceso de achicamiento de gastos, reajuste de tareas y reestructuración del personal y departamentos. Sin embargo, desde la Casa Rosada se reclamó un ajuste mayor al propuesto, hecho que motivó el alejamiento del titular del organismo, Juan Cruz Molina.
Según Pereda, desde el INTA “hicimos una propuesta de reconstrucción y redefinición de la institución: el plan planteaba un ahorro anual de 1.000 millones de pesos. Tenía que ver con cerrar algunas agencias de extensión rural sin perder territorialidad, reducir la estructura y bajar cargos”.
Más allá de ello, aseguró que “fue un poco más agresiva la propuesta del gobierno” y consignó que “el gran problema que tenemos es que no tenemos diálogo con Sturzenegger. Y nos preguntamos ¿Cómo se puede desregular algo sin hablar con los funcionarios que están cotidianamente a cargo de la nueva dimensión?”.
Por ello, Pereda objetó lo expuesto oportunamente por el ministro Sturzenegger: “está dando algunos datos imprecisos. Creo que está mal asesorado porque se equivoca cuando se expresa sobre el INTA”.
HM / Gi
